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Los obispos de Puerto Rico anunciaron la realización, en este 2019, de un Año Misionero Extraordinario, que comenzará el 13 de enero en la fiesta del Bautismo del Señor, y culminará el 19 de octubre, en la víspera de la Jornada Mundial de las Misiones.
Según informa la agencia vaticana Fides, los obispos explicaron que los objetivos de esta iniciativa son revivir la conciencia bautismal en relación con la misión del Iglesia; despertar la conciencia de la missio ad gentes; retomar con un nuevo impulso la responsabilidad de proclamar el Evangelio; despertar la vitalidad misionera; y colocar la misión de Jesús en el corazón de la Iglesia misma.
Por eso los obispos proponen un recorrido en tres etapas de acuerdo a los tiempos fuertes del año litúrgico, basados en tres “llamadas”: la de la conversión personal y pastoral; la llamada a la comunión; y finalmente la llamada a la misión vivida en concreto, según el método “ver, juzgar y actuar”.
Desde el Bautismo del Señor hasta la Vigilia Pascual, será el momento de “mirar nuestra realidad personal, comunitaria y eclesial” para volver a revivir el compromiso bautismal e iniciar el “cambio que nos ayudará a ser testigos de la fe en una sociedad cada día más secularizada”, explican los obispos.
El tiempo de Pascua será la oportunidad para “discernir lo que el Espíritu dice a las Iglesias” actualmente, guiados por la lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles.
Finalmente, a partir de Pentecostés, el objetivo será “actuar, salir a las periferias donde se necesita el alegre testimonio de los cristianos”, conocer los lugares de la misión para colaborar con la oración y la solidaridad, y buscar nuevos misioneros, es decir, bautizados que puedan ser enviados desde Puerto Rico al resto del mundo.
El Año Misionero Extraordinario finalizará con una Misa solemne en la que se lanzará el sexto Congreso Misionero Americano (CAM 6), que tendrá lugar en 2023, en la diócesis puertorriqueña de Ponce.
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