El Papa Francisco envió un telegrama de condolencias a la reina de Inglaterra, Isabel II, por el fallecimiento de su esposo el príncipe Felipe de Inglaterra, duque de Edimburgo.
El Pontífice envió el telegrama por medio del Cardenal Pietro Parolin en el que el Secretario de Estado del Vaticano señala que “entristecido por la noticia del fallecimiento de su esposo el príncipe Felipe, duque de Edimburgo, Su Santidad el Papa Francisco expresa su más sentido pésame a Su Majestad y a los miembros de la familia real”.
"Al recordar la dedicación del príncipe Felipe a su matrimonio y a su familia, su distinguida trayectoria de servicio público y su compromiso con la educación y el progreso de las generaciones futuras, Su Santidad lo encomienda al amor misericordioso de Cristo Nuestro Redentor. El Santo Padre invoca las bendiciones del Señor de consuelo y paz sobre usted y sobre todos los que lloran su pérdida con la segura esperanza de la resurrección”, concluye el telegrama.
El príncipe Felipe falleció a los 99 años de edad el viernes 9 de abril en el castillo de Windsor, segunda residencia de la reina de Inglaterra.
El duque de Edimburgo, nacido en Grecia y perteneciente a la familia real griega, debió renunciar a su religión ortodoxa y adoptar el anglicanismo para poder casarse con la futura reina de Inglaterra, que también es cabeza de la comunidad anglicana.
Felipe de Edimburgo destacó a lo largo de su trayectoria por su servicio a su mujer en sus tareas como reina de Inglaterra y al pueblo inglés. De hecho, el príncipe destacó también por su servicio en la Marina Real Británica durante la Segunda Guerra Mundial.
Asimismo, siempre estuvo muy comprometido con la promoción del diálogo ecuménico e interreligioso y mostró una gran cercanía a los Papas San Juan XXIII, San Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco.
El príncipe Felipe de Edimburgo se encontraba muy frágil de salud después de una delicada operación de corazón a la que debió someterse el pasado mes de marzo.
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