Del total de 208 ataques registrados a lo largo de 2022, cerca del 85% fueron cometidos contra cristianos (175 casos), de los cuales los sucedidos contra los católicos suponen 3 de cada 4 (74,52%). Por otro lado, lo ataques contra judíos o musulmanes se han reducido.
El OLRC clasifica los sucesos contrarios a la libertad religiosa según sus diferentes características. Los casos que considera “más sensibles” son los 4 que han implicado violencia física y dirigida sólo contra católicos.
Además, se han registrado más de 35 ataques a lugares de culto o contra símbolos religiosos, lo que supone un aumento del 40% respecto al año anterior. De ellos, 31 fueron contra católicos.
El capítulo de vejaciones a creyentes (25 casos) se mantiene más o menos estable respecto a 2021, cuando se registraron 22 episodios. Por otro lado, el OLRC ha logrado identificar 52 casos de escarnio (44 contra católicos, 8 contra cristianos de otras confesiones y 1 contra judíos).
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