27 de marzo de 2023 / 6:43 p. m.
Un canal de televisión en Connecticut (Estados Unidos) informó que la Arquidiócesis de Hartford está investigando un posible milagro eucarístico que habría ocurrido durante una Misa en la iglesia de Santo Tomás, en el pueblo de Thomaston.
El 5 de marzo, al final de la Misa, el P. Joseph Crowley anunció que un ministro de la Eucaristía presenció algo inexplicable mientras distribuía la Comunión.
“Uno de nuestros ministros eucarísticos se estaba quedando sin hostias y, de repente, había más hostias en el copón. Dios simplemente se duplicó a sí mismo en el copón”, contó emocionado el P. Crowley a los fieles.
“Es realmente genial cuando Dios hace estas cosas, y es realmente genial cuando nos damos cuenta de lo que ha hecho, y acaba de suceder hoy. Muy poderoso, muy impresionante, muy real, muy impactante”, expresó el sacerdote.
El presbítero reiteró que “se estaban quedando sin hostias y, de repente, había más”.
El medio WFSB Eyewitness News informó el viernes 24 de agosto que “la Arquidiócesis de Hartford está investigando este posible milagro”.
Milagros eucarísticos en el mundo
Una exhibición respaldada por el Vaticano, “Milagros eucarísticos del mundo”, que presenta evidencia documental de 152 de dichos prodigios, ha visitado más de 3.000 iglesias en su gira internacional. En el siglo XXI ha habido cuatro milagros eucarísticos reconocidos por la Iglesia Católica, informó el Centro Magis.
En 2013, en una iglesia en Legnica, Polonia, se puso en agua una hostia consagrada que cayó al suelo para que se disolviera. En cambio, se llenó de manchas rojas. Las pruebas forenses concluyeron: “En la imagen histopatológica, se encontraron fragmentos que contenían las partes fragmentadas del músculo estriado cruzado. Es más similar al músculo cardíaco”.
En 2006, una hostia consagrada en una parroquia de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, en México, parecía sangrar. Las pruebas posteriores confirmaron la presencia de sangre. “La sustancia rojiza analizada corresponde a sangre en la que hay hemoglobina y ADN de origen humano”, constató el estudio.
En 2001, testigos informaron haber visto el rostro de Jesús aparecer en una hostia consagrada en Chirattakonam, India.
Y en 2008, en una iglesia en Sokolka, Polonia, un sacerdote dejó caer una hostia consagrada, que luego pareció sangrar. Más tarde, las pruebas encontraron que “el fragmento alterado de la hostia es idéntico al tejido miocárdico (corazón) de una persona que está a punto de morir. Además, la estructura de las fibras musculares y la del pan están entretejidas de una manera imposible de producir por medios humanos”.
(El artículo continúa después)
Traducido y adaptado por ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.
Publicar un comentario