La madre de la joven María del Valle González López, que murió en abril por un aborto legal, aseguró que no es verdad que esta práctica sea ni segura ni gratuita, en el marco de una caravana por la vida y la justicia realizada en Mendoza (Argentina).
Lidia Fiore, madre de María del Valle, agradeció a los participantes en la caravana organizada por Unidad Provida Mendoza y realizada el sábado 4 de diciembre, con el punto de encuentro final en el Parque General San Martín en Mendoza.
La madre de María del Valle pidió que los que defienden la vida en Argentina “seamos escuchados por nuestros gobernantes. Que suspendan la ley de un aborto seguro, legal y gratuito porque esto no es verdad”.
“Yo perdí a mi hija y a mi nieto por un aborto seguro, legal y gratuito, porque mi hija creyó en la seguridad, en lo legal, en lo gratuito. Y no hay seguridad, no puede ser ni debe ser legal, y no es gratis porque se paga con la vida”, explicó Lidia.
Dirigiéndose luego a las niñas y adolescentes presentes, la madre de María del Valle les ofreció el siguiente mensaje: “No se dejen manipular. No es verdad que existe un aborto seguro, legal y gratuito. No queremos una María más, que no haya otra María, que no haya una chica más que pase por lo mismo”.
“Muchísimas gracias a todos, a la familia, a mis hijos, mis nietos que están aquí. Muchas gracias a todos porque María está en el corazón de cada uno de nosotros. Muchísimas gracias por estar acá”, concluyó.
Luego de la intervención de Lidia Fiore, se encendieron velas como una forma de homenaje a María del Valle, su bebé y otras víctimas del aborto.
En la caravana realizada bajo la consigna “Legal o ilegal, el aborto mata igual”, los participantes asistieron con pañuelos celestes, globos y banderas argentinas.
Los autos llevaban carteles con consignas como “Salvemos las dos vidas” y “La mejor forma de salvar vidas es acabar con el aborto”.
Tatiana, una de los jóvenes asistentes, dijo que “estamos acá para visibilizar lo que está sucediendo, pidiendo justicia para que esto no vuelva a suceder, porque hoy no se brinda una ayuda real a la mujer”.
“Estamos hablando de la dignidad humana de ambas personas, la madre y el niño por nacer", resaltó.
Unidad Provida Mendoza también se sumó al pedido de la suspensión de la ley del aborto aprobada por el Congreso en diciembre de 2020; y criticaron la desinformación sobre los procedimientos y las posibles consecuencias de aborto.
“Es muy importante que no nos callemos, que sigamos apoyando las marchas”, indicaron.
El caso de María del Valle
María del Valle González López tenía 23 años y era presidenta de la Juventud Radical en el municipio de La Paz en la provincia argentina de Mendoza. Estudiaba Trabajo Social en la Universidad Nacional de Cuyo.
El 11 de abril murió luego de someterse a un aborto legal, tras haber tomado varias pastillas de misoprostol, un fármaco abortivo. Se trata de la primera muerte de una mujer argentina tras la aprobación del aborto legal en el país.
En una nota publicada el 3 de diciembre, Infobae señaló que “ocho meses después de la tragedia, la familia todavía no encontró justicia”.
Esto, pese a que “en el celular de María del Valle están los mensajes que confirman que una médica la había guiado a la distancia para usar 12 pastillas de misoprostol y que luego no prestó atención a los síntomas que la joven le comunicó varias veces”.
El misoprostol es una prostaglandina que hace que el útero expulse lo que está en su interior. En el caso de un embarazo provoca que la madre pierda al niño por nacer, lo que puede generar que la mujer se desangre.
En algunos casos la hemorragia puede hacer que la madre entre en shock hipovolémico y muera.
Por lo general, la mujer que toma misoprostol va luego a un centro de salud para hacerse un legrado y así quitar del útero cualquier resto del bebé.
Si este legrado o raspado se realiza usando material no esterilizado adecuadamente o contaminado, esto puede provocar una infección que podría llevar a la septicemia o infección generalizada, lo que también puede ocasionar la muerte.
Infobae indicó el 3 de diciembre que la familia de María del Valle “cree que se busca tapar algo: el fiscal no aceptó el celular de María como prueba y la autopsia demoró meses”.
“Nosotros somos provida y mi hermana también lo era hasta hace unos años. La Facultad lamentablemente la cambió”, dijo el hermano de la joven.
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