El Presidente de la Conferencia Episcopal (CEB), Mons. Ricardo Centellas, llamó a “trabajar por la unidad”, convencidos de que “la responsabilidad por el desarrollo integral” del país depende de todos.
El Prelado hizo este llamado en el marco de la Asamblea Plenaria de la CEB que se realiza del 8 al 13 de noviembre, y en la que los obispos analizan y reflexionan sobre la realidad del país y piden al Espíritu Santo reconocer la misión de la Iglesia en la construcción de la nación.
En medio de un complicado escenario político, dado por las elecciones presidenciales previstas para octubre de 2019, Mons. Centellas manifestó que existen “muchos signos de arbitrariedad y abuso de poder”. “No podemos ser espectadores en el constante debilitamiento y, ojalá no, la ruina total de la democracia”, señaló.
“No alentemos las contradicciones: decir que estamos bien, mientras que la mayoría de los bolivianos experimenta la pobreza, afirmar que somos un modelo económico y no tener industrias que generen empleos dignos; ser un país plurinacional pero con acumulación y centralización de poder”, agregó.
El también Obispo de Potosí expresó que los bolivianos tienen una “vocación pacífica, noble y sublime” para trabajar por la unidad, “superando la mentalidad egoísta, las mezquindades humanas y confiando en las generaciones jóvenes que están preparadas y entusiastas para trabajar por una Bolivia a la altura de los desafíos actuales”.
Mons. Centellas sostuvo que la responsabilidad por el desarrollo integral de Bolivia depende de todos y “nadie puede ser excluido, discriminado, ni eliminado por su pensamiento, condición social u opción política”.
“No nos dejemos vencer por la división, por el miedo a otras alternativas y por el pesimismo hegemónico y apocalíptico de unos cuantos”, señaló.
Mons. Centellas también dijo que el reciente Sínodo sobre los Jóvenes y la preparación para el próximo Sínodo Panamazónico les hace “afrontar los diversos desafíos con esperanza y firmeza”.
Dado lo anterior, “los nuevos caminos de la Iglesia tienen que defender la vida integral de las personas” y el “servicio pastoral tiene que tener ineludiblemente un contenido social” que se comprometa “en favor del otro para mejorar su vida y así, hacer presente en el mundo el Reino de Dios”.
Por último, el Presidente de la CEB aseguró que el testimonio de los recién canonizados: San Pablo VI, que exhortó a ser una Iglesia evangelizadora”; San Oscar Romero, que mostró actitud profética la defensa de los derechos humanos; y Santa Nazaria Ignacia, “incansable defensora de la Iglesia y comprometida con la formación cristiana” la dignidad y el respeto de la mujer y los pobres; son motivo de “alegría para seguir adelante con nuestra misión”.
Publicar un comentario