Al finalizar la Asamblea de la Conferencia Episcopal Boliviana, los obispos enviaron un mensaje a la población con un llamado al cese de la “violencia desmedida”, y pidieron que la crisis social se resuelva “lo antes posible, ojalá hoy”.
En su mensaje difundido este martes 15 de noviembre, los obispos recordaron que los gobiernos son quienes deben “garantizar los derechos de los ciudadanos”.
Para ello, pidieron una actitud de “escucha auténtica” que garantice una convivencia “pacífica, dialogante, con responsabilidad y procurando el bien común”.
Este urgente llamado de la Iglesia se produce en el marco del creciente conflicto en la zona de Santa Cruz, donde el paro ya lleva más de 20 días con un reclamo de que el censo poblacional se realice en 2023.
Pese a que el gobierno fijó la fecha para marzo de 2024, la tensión no disminuye.
En ese contexto, los obispos afirmaron que la coyuntura boliviana actual “preocupa a todos por el desencuentro y la confrontación, exacerbada por la violencia desmedida”, y motivada por “fines políticos de contraposición”.
Esto, aseguraron, genera como respuesta un aumento de la violencia y el quiebre social. Ante la realidad, los pastores llamaron a “promover entre todos la cultura del encuentro”.
“Es un llamado al desarme de posiciones violentas”, expresaron, pues “no avanzaremos nada enfrentándonos como enemigos”.
También reclamaron “respeto y garantías para quienes, en justicia y derecho, disienten de la visión de quienes nos gobiernan”, para que no se conviertan en “víctimas de persecución y del uso inapropiado de la justicia”.
“Instamos a las fuerzas del orden, a que no sean factores de enfrentamiento y de violencia, sino que actúen conforme a su posición, protegiendo a la población en su conjunto”, añadieron, recordando que “la esperanza es la virtud que nos pone en camino y nos da fuerza para avanzar”.
“Pedimos a las comunidades cristianas que intensifiquen en estos días su oración y su compromiso en la promoción de la cultura de la fraternidad y del respeto a los derechos humanos”.
“La ya cercana Natividad de nuestro Salvador nos encuentre trabajando por nuevos y renovados caminos de escucha, respeto y tolerancia”, anhelaron.
Consultados sobre la propuesta de que Santa Cruz se convierta en un estado federado, la Conferencia Episcopal consideró que “las leyes, la constitución es la que debe marcar los pasos que quisiera dar cualquier región”.
“Habrá que ver lo que conviene, no tiene que hacerse a la fuerza, sino con pasos serenos, dialogados y que busquen el beneficio de todos”.
Además, aseguraron que “como Iglesia, desde hace 24 días, e incluso un poco antes de que ocurriera el paro, hemos llamado al diálogo a las partes, porque tenemos la experiencia de que va subiendo la tensión”.
El diálogo sincero, honesto y claro, aseguraron, "es el único camino para entendernos, porque parece que entre bolivianos, después de casi un mes, no nos estamos entendiendo”.
Los obispos reiteraron su deseo de que "esto no se dilate y el problema pueda solucionarse lo antes posible, ojalá hoy”, porque "las familias son las que más sufren”.
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