Ante la noticia de la muerte de Abimael Guzmán, creador e ideólogo del grupo terrorista peruano Sendero Luminoso, el Arzobispo Metropolitano de Piura, Mons. José Antonio Eguren, recordó que “su odio totalitario” dejó un legado de destrucción en el país.
El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos del Perú confirmó en un comunicado que Guzmán, de 86 años, murió “debido a complicaciones en su estado de salud”.
El MINJUSDH, a través del INPE, informa la muerte de Abimael Guzmán a través del siguiente comunicado: pic.twitter.com/w05ZbL1KQp
— Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (@MinjusDH_Peru) September 11, 2021
Desde su captura en la década de 1990, Guzmán purgó prisión en el Centro de Reclusión de Máxima Seguridad de la Base Naval del Callao.
En declaraciones a ACI Prensa, Mons. Eguren destacó que “su muerte se da en la víspera de celebrarse los 29 años de su captura por parte de nuestra Policía Nacional”.
“Guzmán, fue fundador de la banda asesina, terrorista y comunista de Sendero Luminoso, causante en los años 90 de la masacres de comunidades enteras de humildes pobladores de nuestros Andes y Selva, así como de personas en las ciudades, incluidos ancianos, mujeres gestantes y niños, quienes fueron cruelmente asesinados”.
El Prelado señaló que el “odio totalitario” de Guzmán alcanzó “también a la Iglesia, que sufrió la muerte de tres sacerdotes los cuales fueron beatificados el año 2015, y de la religiosa María Agustina Rivas López, conocida como ‘Aguchita’, asesinada en 1990, cuyo decreto de beatificación por martirio ha sido firmado recientemente por el Papa Francisco”.
“Hoy, en que vemos con estupor que personas con un historial oscuro de vinculación a Sendero Luminoso ocupan cargos en el gobierno y en el congreso, no podemos olvidar lo que esta ideología, intrínsecamente perversa, significa y el sufrimiento que ha causado en la historia reciente del Perú”, expresó.
Menos aún, continuó, los peruanos pueden “permitir que puedan capturar el poder”, añadió.
El Arzobispo peruano destacó luego que “el Señor Jesús no ha pedido amar a nuestro enemigos y en la cruz nos ha dado ejemplo de ello. Roguemos a Dios que tenga misericordia de su alma”.
Abimael Guzmán y su legado de terror y muerte en el Perú
Guzmán encabezó en la década de 1960 una facción del Partido Comunista Peruano que tenía como lema “por el Luminoso Sendero de Mariátegui”, tomando como inspiración al escritor y político peruano José Carlos Mariátegui.
En esa época es que Abimael Guzmán comienza a usar el alias de “presidente Gonzalo”, con el que lo reverenciarían los terroristas de Sendero Luminoso.
Para fines de la década de 1970, Sendero Luminoso emprendió el camino de la violencia y el terror, bajo la ideología que describían como “marxismo-leninismo-maoísmo-pensamiento Gonzalo”.
Sendero Luminoso extendió la violencia desde la serranía sur del Perú a todo el país, asesinando campesinos, líderes de comunidades, profesionales, policías, militares, políticos y cualquier persona que consideraran un obstáculo a su camino hacia el poder.
Se estima que Sendero Luminoso asesinó a más de 30 mil personas.
No sería hasta el 12 de septiembre de 1992 que una labor de inteligencia policial logra la captura de Abimael Guzmán en Lima, Perú.
Con la captura del cabecilla terrorista, Sendero Luminoso comenzó un proceso de repliegue que los llevó a asociarse con el narcotráfico en regiones inhóspitas del Perú y a crear un brazo político llamado Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (MOVADEF).
Desde el proceso electoral de 2021, que concluyó con la victoria del actual presidente Pedro Castillo, se acusaron diversos vínculos entre su partido, Perú Libre, y el MOVADEF.
En su Plan de Gobierno, el partido del actual Presidente del Perú asegura que “decirse de izquierda cuando no nos reconocernos (sic) marxistas, leninistas o mariateguístas (sic), es simplemente obrar en favor de la derecha con decoro de la más alta hipocresía”.
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