La Santa Sede expresó su preocupación por el grave impacto que la pandemia de COVID 19 ha tenido, y todavía tiene, sobre las empresas y trabajadores del sector del turismo.
Con motivo de la Jornada Mundial del Turismo 2021, que se celebrará el próximo 27 de septiembre, el Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, Cardenal Peter Kodwo Appiah Turkson, envió un mensaje en el que pide aprovechar la actual coyuntura para ir más allá de los datos económicos y reconocer que, detrás de cada número, hay una persona.
El Cardenal animó a ponerse tras la estela marcada por el Papa Francisco y “ejercitar la creatividad que permite encontrar soluciones a un problema, invocar la dignidad humana frente a la rigidez de la burocracia y promover el bienestar social y económico de toda la humanidad, ofreciendo a cada persona la oportunidad de perseguir su propio desarrollo”.
El Cardenal Turkson recordó que “frente a la pandemia de COVID 19, el Papa Francisco hizo un llamado a toda la familia humana porque no podemos volver a las falsas seguridades de las estructuras políticas y económicas que había antes de la crisis”.
“Necesitamos sistemas económicos que permitan a todos tener acceso a los frutos de la creación, a las necesidades básicas de la vida: tierra, casa y trabajo. De hecho, eso es el tipo de crecimiento inclusivo o, en lenguaje de la Doctrina Social de la Iglesia, el desarrollo humano integral que el Dicasterio desea promover”, explicó.
Es decir, “un desarrollo que sea para toda persona, para todas las dimensiones de la persona, que respete la tierra, es decir, nuestra casa común. La pandemia nos ha hecho comprender que estamos vinculados unos a los otros. También el turismo en un país sufre si en otros países las personas no se pueden desplazar debido a las restricciones sanitarias”.
Por lo tanto, “es necesario concentrarse en una aproximación inclusiva al turismo y resistir las tentaciones del individualismo y del nacionalismo, excesivamente relevantes en la sociedad contemporánea”.
“Sólo de esa maneta evitaremos la variante del virus que se difunde cuando fomentamos una economía enferma que permite a pocas personas muy ricas poseer más de aquello que posee el resto de la humanidad, y cuando los modelos de producción y consumo destruyen el planeta”.
Por lo tanto, “con motivo de la Jornada Mundial del Turismo de este año, el Dicasterio anima a todos a comprometerse por un turismo que permita el encuentro entre personas y con los diferentes territorios, donde la admiración de la belleza pueda abrir estilos de vida respetuosos con los demás y con el planeta”.
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