La Diócesis de Malakal, la más grande de las siete diócesis católicas de Sudán del Sur, ha sido devastada por serias inundaciones, que han causado que cientos de miles sean afectados, y su Obispo, Mons. Stephen Nyodho ha hecho un llamado a las autoridades a que declaren “un desastre nacional”, para que la comunidad internacional pueda proveer ayuda.
En declaraciones a ACI África –agencia africana del Grupo ACI– el 25 de octubre en Juba, en el marco de la Asamblea Plenaria de la Conferencia de Obispos Católicos de Sudán, Mons. Nyodho dijo que “estoy pidiendo al gobierno de Sudán del Sur que salga abiertamente y declare las inundaciones como un desastre nacional”.
El Prelado también criticó el silencio que rodea el fenómeno natural que amenaza al pueblo de Dios en el territorio de su diócesis.
“Si seguimos así, va a afectar las vidas de miles de personas. Muchos ya han sido afectados.
Las inundaciones han afectado a instituciones de la Iglesia, incluyendo edificios de parroquias y capillas, así como escuelas y centros de atención médica, cuyas estructuras están sumergidas por las inundaciones causadas por las fuertes lluvias y desbordes de ríos.
“Justo hablé con uno de los sacerdotes en Bentiu y me dijo que incluso algunas de las escuelas están cerradas debido a que mucha gente desplazada por las inundaciones está siendo ubicada en las escuelas”, señaló el Prelado.
Las inundaciones han afectado también los cultivos y el ganado de la zona.
En su reporte del 25 de octubre de este año, sobre las inundaciones de Sudán del Sur, la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios ha descrito el fenómeno natural como “inundaciones estacionales anormalmente fuertes”, que han afectado alrededor de 908 mil personas.
“Las lluvias probablemente continuarán al menos hasta fines de noviembre y pondrán a más gente en riesgo. Las intensas lluvias han golpeado zonas que ya enfrentan necesidades humanitarias”, continúa el informe de Naciones Unidas.
Mons. Nyodho hizo un llamado a “la comunidad internacional, el pueblo de Sudán del Sur y toda la gente de buena voluntad a venir al rescate de la gente de Sudán del Sur”.
La última vez que la región sufrió una inundación fue en 2008, dijo el Prelado.
SI bien se espera que el presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, y Riek Machar, líder de un grupo rebelde, formen un gobierno de unidad, esta esperanza de paz en el país no sería del todo segura.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha insistido en que “los partidos de Sudán del Sur deben formar un gobierno de unidad para el 12 de noviembre sin demora”.
Traducido y adaptado por David Ramos. Publicado originalmente en ACI África.
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