Ayuda a la Iglesia Necesitada en Italia presentó en Roma las conclusiones de su estudio “Perseguidos más que nunca. Informe sobre la persecución anticristiana entre el 2017 y el 2019”.
Este informe presentado el 24 de octubre examina el desarrollo de los 20 países más afectados por esta vulneración de derechos humanos desde julio de 2017 hasta hoy y demuestra que los cristianos son el grupo religioso que más es perseguido y el eje del fundamentalismo islámico se ha trasladado de África y Asia meridional y oriental.
El Cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales calificó el informe presentado por Ayuda a la Iglesia Necesitada como “un instrumento precioso”.
Esta fundación pontificia denunció que hay casi 300 millones de cristianos que viven en países donde hay persecución. En el periodo estudiado, la situación no ha mejorado y a la lista de cristianos que sufren se han unido los países de Camerún, Burkina Faso y Sri Lanka.
Estos dos últimos países representan, según Alessandro Monteduro, director de ACN Italia, los ejemplos más dramáticos de este escenario cambiante de la persecución anticristiana que encuentra nuevas formas y nuevos territorios por la ineficacia de las estrategias que hasta ahora se han puesto en marcha.
“El estudio de ACN lamentablemente demuestra que la respuesta militar no es suficiente. De hecho desde el 2017 desde la derrota del ISIS en el norte de Irak y en gran parte de Siria, hemos asistido a la migración del terrorismo en otras partes del mundo, sobre todo en África y en Asia meridional y oriental”, precisó Monteduro.
Además explicó que “los 20 países que Ayuda a la Iglesia Necesitada muestra como territorios en los que las minorías cristianas sufren persecución, reúnen a más de 4 mil millones de personas. La defensa de la libertad religiosa debería ser más prioritaria que nunca en la agenda de las grandes potencias nacionales y de las instituciones supranacionales. Sin embargo todavía no es así”, destacó el director de ACN Italia.
Aunque la relaciones diplomáticas han mejorado entre los jefes de las naciones occidentales y sus homólogos en los regímenes, como los Corea del Norte o China, esto no significa una mejora de las condiciones de los cristianos en esas zonas, como destacó Alfredo Mantovano, presidente de ACN Italia.
“No podemos engañarnos a nosotros mismos con que la posible reducción de armamento o la firma de tratados de cooperación económica dentro de las fronteras corresponde a una disminución de la persecución religiosa. La ruta de la seda también se recorre fácilmente por armas y dinero. Mientras que países como Italia aceptan los acuerdos con el subcontinente chino, los cristianos allí sufren una reducción de sus posibilidades de realizan manifestaciones de fe públicas, así como en privado, que no sean controladas por las estructuras del partido”, aseguró Mantovano.
Este informe también muestra que en Asia meridional y oriental en el periodo examinado se han verificado algunos ataques anticristianos más fuertes, como el que tuvo lugar en Sri Lanka el día de Pascua y que costó la vida a 258 personas.
Durante la presentación de este informe estuvo presente el rector del Santuario de San Antonio en Colombo, el P. K.A Jude Raj Fernando, que contó los trágicos momentos en los que su iglesia fue atacada.
“No podía creer lo que estaba viendo con mis ojos. Vi a mis parroquianos muertos, ensangrentados y me preguntaba ¡Dios mío! ¿Por qué?” Pero a pesar de la gran herida que esto causó permanecimos fuertes en nuestra fe, que nos permite perdonar a nuestros perseguidores. Perdonamos y seguimos pidiendo justicia para nuestras víctimas. Es por lo que rezamos todos los días”, aseguró el P. Jude Raj Fernando.
Este informe de ACN denuncia también la dramática situación de África, donde en los últimos años ha aumentado las formaciones yihadistas que han golpeado a los cristianos en más lugares.
En la violencia anticristiana el precio más alto lo pagan los sacerdotes y religiosos. De hecho, de los 18 sacerdotes y 1 religiosa asesinados en el mundo durante el año 2019, 15 de ellos murieron en África, en concreto 3 en Burkina Faso.
En este país, según contó el P. Roger Kologo, sacerdote burkinés, “es un acto de verdadera caza a los cristianos, que son golpeados durante procesiones y expresiones públicas de su fe e incluso se les busca en sus propias casas para ser ajusticiados. Desde el inicio del año más de 60 fieles han sido asesinados”.
El sacerdote explicó la trágica escalada de ataques anticristianos iniciados en su propia diócesis el pasado viernes santo y recordó al sacerdote Joel Yougbare, secuestrado.
“La noche antes del secuestro habíamos cenado juntos. Me dijo que iba a visitar una comunidad en un área remota. Sabía que era peligroso, los yihadistas lo tenían controlado y más de una vez le habían seguido, pero él no quería abandonar a sus fieles. Es un hombre muy valiente y nosotros seguimos rezando por él para que continúe con vida”.
Puede acceder al informe íntegro en italiano AQUÍ
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