Con proclamas a favor del aborto, insultos contra la Iglesia y arrancando los carteles en los que se leía “sí a la vida”, un colectivo feminista atacó la Catedral de Santa Rosa en La Pampa, Argentina, durante la celebración de la Misa.
La agresión a la catedral argentina formó parte del “pañuelazo” organizado por las feministas la noche del 31 de mayo en Santa Rosa. La manifestación, que recorrió varias calles de la ciudad, incluyó pintas y daños a edificios públicos y privados.
El pañuelo verde es usado como símbolo por las feministas radicales que promueven la legalización del aborto en Argentina.
Desde el 10 de abril de 2018, la Cámara de Diputados de Argentina debate la legalización del aborto. La votación definitiva está programada para el 13 de junio.
La plataforma Argentinos por la Vida denunció el ataque, a través de un video publicado en Facebook.
“Nuevamente tenemos a las ‘chicas de pañuelo verde’ haciendo honor a su investidura disfrazada de tolerancia y ‘derechos humanos’, claro para los que piensan como ellos, pisoteando toda libertad de culto y/o religiosidad”.
“¿Todavía seguimos pensando que piden por los derechos de las mujeres?”, cuestionó la plataforma provida.
Desde el inicio del debate de la legalización del aborto en Argentina, diversos grupos han expresado su oposición a esta práctica y han advertido de sus peligros.
El 20 de mayo, 3 millones marcharon en Buenos Aires y otras ciudades argentinas en defensa de la vida y contra el aborto.
Recientemente, en una columna publicada en el diario La Nación, miles de médicos denunciaron las falacias de quienes promueven el aborto, como calificar de “religiosos” a quienes se oponen a esta práctica o afirmar que el niño en el vientre es “parte del cuerpo” de la madre.
“El aborto no libera a la mujer de ser madre, la convierte en madre de un hijo muerto”, advirtieron los expertos.
El gobierno del Presidente de Argentina, Mauricio Macri, quien en 2016 de manifestó en defensa de la vida, ha respaldado la legalización del aborto.
Sin embargo, para el P. José María di Paola, más conocido como el Padre Pepe, viejo amigo del Papa Francisco, el apoyo gubernamental al aborto tiene relación con las negociaciones que realiza con el Fondo Monetario Internacional para obtener ayuda económica.
El 31 de mayo, en el cierre del debate en la Cámara de Diputados, el Padre Pepe dijo que “no es inocente que este año se instale el aborto desde la política para acercarse a aquel que promueve en todo el mundo el aborto que es el FMI”.
“Aborto es sinónimo de FMI le guste o no al mundo conservador, que no ve con malos ojos que los pobres tengan menos cantidad de hijos o que no los tengan, y también al mundo pseudo progresista, que levanta banderas de presunta libertad sabiendo que este genocidio es inspirado y promovido por el FMI”, señaló.
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