Mons. Davis enfrentaba las imputaciones desde junio de 2014. La policía local lo acusó de abusar de un menor de 13 años en la escuela St. Benedict en 1969, dos años antes de que fuera ordenado sacerdote. Otras acusaciones lo vinculaban con incidentes ocurridos en la misma escuela hasta el año 1972.
El proceso judicial tuvo lugar entre el 8 y el 15 de febrero de 2016.
La Diócesis Católica de la Fuerza de Defensa Australiana (el ejército del país) confirmó en un comunicado difundido el 15 de febrero que “el Obispo Max David, Obispo de la Diócesis Católica de la Fuerza de Defensa Australiana, ha sido encontrado inocente de todas las acusaciones”.
Desde que surgieron las acusaciones, el prelado australiano defendió su inocencia e incluso, durante el juicio, se reveló que Mons. Davis denunció ante las autoridades de la escuela a un religioso –hoy fallecido–, tras recibir distintas acusaciones de parte de estudiantes.
La diócesis castrense explicó en su comunicado que Mons. Davis “se hizo a un lado de su cargo como Obispo” el 30 de junio de 2014. “Ahora se tomará un tiempo para decidir si regresa al ministerio público”, añadió.
El obispado alentó también a “cualquier víctima de abuso por parte del clero o trabajadores de la Iglesia Católica, o cualquier otra agencia o persona, a reportar el asunto a la policía y buscar asistencia a través de los servicios legales y de apoyo dedicados”.
También te puede interesar:
La historia que Spotlight no cuenta https://t.co/eQuDDOtKAG
— ACI Prensa (@aciprensa) 1 de marzo de 2016
Publicar un comentario