Mons. Parolin, aseguró que los eventuales “errores e ineficiencias” que pueden producirse en la gestión económica y financiera del Vaticano hacen aún más “oportuna y necesaria” la reforma puesta en marcha para lograr una “mayor eficacia y transparencia”.
Según explicó a Vida Nueva, dicha reforma debe ir unida a un convencimiento entre los eclesiásticos, los hombres de Iglesia, que se espera de ellos “un estilo de vida sobrio, en la línea de la pobreza evangélica, así como un comportamiento moralmente intachable”.
El Secretario de Estado forma parte del Consejo de Cardenales que asesora al Papa en la reorganización de la Santa Sede, desde esa posición Mons. Parolin destaca tres elementos para evitar la “'elefantiasis' de la Curia y garantizar que pueda ser un instrumento directamente en manos del Papa”: coordinación, simplificación y descentralización.
El Purpurado asegura en la entrevista que no considera que haya “una resistencia interna a los cambios. O, si la hay, la podemos considerar ‘fisiológica’”.
Ayuda a los inmigrantes
Ante la entrada masiva de inmigrantes y refugiados en Europa, el máximo responsable de la diplomacia vaticana insta a Europa a encontrar soluciones de forma “urgente” para hacer frente a la mayor oleada de desplazados desde la Segunda Guerra Mundial.
Por eso destaca la importancia de utilizar “los instrumentos jurídicos, técnicos y sobre todo culturales” adecuados, de manera que se respeten “la dignidad y los derechos” tanto de sus ciudadanos como de los recién llegados.
Mons. Parolin reconoce que “estamos todos asustados” ante los atentados del islamismo radical, aunque invita a “no dejarse paralizar” por el miedo y pide a los líderes musulmanes que condenen “todos y cada uno de los actos de terrorismo cometidos en nombre del Islam” para que quede clara la “total incompatibilidad” entre violencia y religión. ?
¿Visitará el Papa China?
Como secretario de Estado Vaticano, Mons. Parolin acompaña al Papa Francisco en sus viajes, así lo hará del 12 al 18 de febrero próximo cuando visite México, un viaje que se realizará pocas semanas después de la captura del capo del narcotráfico Joaquín “El Chapo” Guzmán.
En ese sentido el Cardenal Parolin subraya en Vida Nueva la necesidad de “denunciar con claridad la colusión que existe entre algunos centros de poder y los cárteles de las drogas, que pueden así actuar libremente y sin molestias”.
De otro lado, el Purpurado se refirió a China, uno de los puntos más complicados en la agenda internacional de la diplomacia a su cargo. Sin embargo, el progresivo deshielo entre Pekín y el Vaticano hace vislumbrar una eventual visita al gigante asiático.
El Cardenal afirma al respecto que “el Santo Padre ha manifestado repetidas veces no solo su disponibilidad, sino también su deseo de poder ir a China, país que quiere y estima mucho. Hoy no es fácil hacer previsiones. Cuando los tiempos estén maduros, entonces también este viaje se podrá llevar a cabo”.
Situación en España
El Secretario de Estado también habló en Vida Nueva de la situación que actualmente está atravesando España, ya que por los recientes resultados en las elecciones generales del 20 de diciembre la creación de un gobierno resulta complicada.
En ese sentido el Cardenal ha pedido “un Ejecutivo que trabaje por los intereses de todos y que efectivamente represente a todo el país” y pide a las autoridades españolas evitar la “ingobernabilidad que no favorece a nadie”.
En ese sentido el Purpurado también pide que se escuchen “las inquietudes y temores” de la sociedad y considera que el resultado de las urnas lleva implícita “la petición de una mayor colaboración dentro del mundo político”.
Además califica la situación actual de “un importante desafío para el país” y defiende que la Iglesia está llamada a hacer aportaciones al “diálogo constructivo para el bien común”.
Ante el proceso de independencia emprendido desde el gobierno de Cataluña (España) el secretario de Estado subraya que se trata de un “asunto interno español”, además de hacer una llamada al diálogo, insiste en que la solución al conflicto se resuelva “dentro del marco de la legalidad constitucional”.
“Desde la responsabilidad, la búsqueda del bien común y el respeto de la legalidad vigente, deben buscarse puntos de encuentro para facilitar y llevar a cabo un diálogo serio, sereno y auténtico”, precisó Mons. Parolin a Vida Nueva y aseguró que tiene una “gran confianza en la madurez política del pueblo español, manifestada especialmente durante el proceso de transición a la democracia”.
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