Según informó al SIAME el diácono Rafael Parra, campanero mayor de la Catedral, 50 campaneros acreditados harán sonar las campanas en los momentos más importantes de la estadía del Papa en el Distrito Federal del 12 al 14 de febrero.
El día 13 repicarán las campanas en cuanto el Santo Padre salga de la Nunciatura hasta que llegue al Palacio Nacional, donde se reunirá con Enrique Peña Nieto, Presidente de México.
Terminado este encuentro, las campanas sonarán mientras el Pontífice se dirige al Zócalo donde Miguel Ángel Mancera, el jefe de gobierno, le entregará las llaves de la ciudad.
Después las campanas acompañará al Papa hasta que llegue a la Puerta Santa de la Catedral Metropolitana. Ahí se reunirá con los obispos y con Mancera.
El tañir de las 35 campanas también lo acompañará durante su recorrido hasta la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe y en su regreso a la Nunciatura.
Esta será la tercera vez que Rafael Parra “echará vuelo” a las campanas de la Catedral de México. Lo hizo anteriormente cuando San Juan Pablo II y Benedicto XVI visitaron el país.
Espejos y campanas para los Papas
San Juan Pablo II fue recibido en la tierra y el cielo mexicano de una forma muy especial. Durante sus cinco visitas a ese país, los fieles lo saludaron colocando los espejos hacia el cielo para así reflejar la luz del sol.
Este mismo gesto de “Espejo hacia el cielo” se repitió al mediodía del 27 de abril del año 2014 cuando el Papa Francisco canonizó a Juan Pablo II.
Para la visita del Papa Benedicto XVI a México en marzo de 2012 los organizadores optaron por recibirlo con el repique de campanas y ya no utilizar los espejos. Cuando el Papa aterrizó repicaron las campanas y también se pidió a los fieles que lo fueron a recibir que tocaran campanitas. En la ciudad de León, en el Estado de Guanajuato se hizo lo mismo.
"Es como cuando hacemos el llamado a Misa, la campana te llama, es un llamado a la esperanza, al amor, al reencuentro, a decir: tenemos que salir de esta situación que aqueja a México", manifestó entonces a ACI Prensa el P.Jorge Raúl Villegas, uno de los encargados de la logística de la visita a León.
En el último día de su pontificado, el 28 de febrero del 2013, a las 8:00 p.m. Benedicto XVI fue despedido en la Catedral Metropolitana de México con 60 repiques de campanas.
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— ACI Prensa (@aciprensa) enero 9, 2016
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