Mientras que diversos medios internacionales publicaron recientemente que el Papa Francisco no deseaba visitar nunca más Argentina, su país natal, el autor de la entrevista con el Santo Padre hace una importante precisión.
El veterano periodista y neurólogo argentino, Nelson Castro, entrevistó al Papa Francisco para su libro “La Salud de los Papas”, un proyecto que le tomó cerca de dos años y medio de trabajo.
El fragmento que corresponde a la entrevista con el Santo Padre fue publicado por el diario argentino La Nación el 27 de febrero de este año.
Al finalizar la entrevista, Castro le preguntó al Papa “¿cómo imagina su muerte?”, a lo que Francisco respondió que “siendo papa, ya sea en ejercicio o emérito. Y en Roma. A la Argentina no vuelvo”.
En una reciente entrevista con el también periodista Tito Garabal en Radio Grote, Nelson Castro precisó que el Papa Francisco dijo que no volvería a Argentina “en cuanto venir a vivir acá si renunciara, eso es así”.
“Él no dijo ‘no voy a volver a visitar la Argentina’. Le pregunté cómo imagina su muerte en Roma y demás, dijo ‘no vuelvo a morir en la Argentina”.
“Esto es indiscutible como tal. Y tiene dos aspectos: como la entrevista es textual entonces uno quiere ser lo más fiel posible, tanto es así, y esto te lo anticipo, que cuando venga la reedición y la traducción yo voy a introducir esta aclaración, porque se la merece”, indicó.
Castro destacó también que la entrevista surgió a pedido del Papa Francisco, quien se lo sugirió en “dos ocasiones y lo tomé como una misión, que él coronó con un compromiso que me pareció increíble, que fue el de hablar de una manera tan clara, tan contundente, tan sencilla, tan abierta, tan simple y tan humana de su salud, su salud física y su salud psíquica”.
Para el periodista argentino, fue “algo que nunca había ocurrido en los 2000 años de papado y creo que marca no solamente un hito si no que establece un legado”.
Castro aseguró que vio en el Santo Padre a “un hombre sano física y mentalmente, tiene una capacidad para enfrentar una tarea de tamaña magnitud que una persona enferma no tiene”.
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