Irak: 13 mil familias refugiadas reciben víveres de AIN

Desde el inicio de la ofensiva del Estado Islámico, Ayuda a la Iglesia Necesitada ha apoyado a la Iglesia iraquí con más de 7 millones de euros

Roma, 27 de julio de 2015 (ZENIT.org) Staff Reporter | 7 hits

Ayuda a la Iglesia Necesitada pone sus ojos una vez más en Irak y a finales de junio la fundación pontificia ha donado paquetes de víveres a 13 mil familias cristianas refugiadas en el Kurdistán iraquí, por un total de 690 mil euros.

Desde el inicio del avance del Estado Islámico en junio de 2014, AIN “ha apoyado a la Iglesia iraquí con más de 7 millones. En la arquidiócesis caldea de Erbil, donde han encontrado refugio los cristianos que han huido de Mosul y de la Llanura de Nínive, la fundación ha contribuido con más del 60 por ciento de las ayudas recibidas a nivel internacional”.

El arzobispo caldeo de Erbil, monseñor Bashar Matti Warda, tras el envío de los paquetes indicó que “la ayuda de AIN ha tenido un gran impacto en la vida de nuestra comunidad. Desde lo profundo de nuestro corazón damos las gracias por estar cerca de nuestras familias en un momento tan dramático”, indica una nota publicada en la web de la fundación pontificia.

Asimismo, se explica que los regalos fueron distribuidos por grupos de voluntarios de edades entre los 15 y 18 años. “Cada una de las familias ha tenido con qué vivir al menos un mes: arroz, azúcar, aceite, habas, carne, queso y agua. AIN continuerá recogiendo fondos para garantizar el constante envío de víveres en los próximos meses”.

En el kurdistán iraquí, los cristianos se preparan para el primer aniversario de la huída de la Llanura de Nínive. En la noche del 6 al 7 de agosto, más de 120 mil fieles fueron obligados a abandonar sus casas por culpa del avance de las milicias del Estado Islámico. Tras los primeros meses en tiendas de campañas, iglesias o edificios abandonados, “gracias a la contribución de AIN, las familias cristianas han encontrado alojamiento en casas de alquiler o en estructuras prefabricadas facilitadas por la fundación”. Asimismo --indican-- dentro de pocos días iniciará el año escolar, en las ocho escuelas prefabricadas donadas por AIN para garantizar un futuro a los más pequeños.

La Iglesia continúa representando el único punto de referencia para las miles de familias de refugiados “junto con la cercanía y las oraciones de los cristianos de todo el mundo”, asegura monseñor Warda.