Santa Sede y Palestina firman un histórico Acuerdo
El Acuerdo Global 'incluye un reconocimiento oficial de Palestina como Estado por parte de la Santa Sede, como signo de reconocimiento del derecho del pueblo palestino a la autodeterminación'
Ciudad del Vaticano, 26 de junio de 2015 (ZENIT.org) Rocío Lancho García | 0 hits
La Santa Sede y el Estado de Palestina han firmado un histórico Acuerdo Global este viernes en el Vaticano. El acuerdo sigue al que ya había sido firmado entre la Santa Sede y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) el 15 de febrero del 2000 y es el resultado de las negociaciones desarrolladas por una comisión bilateral durante los últimos años. Monseñor Paul Richard Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estado, ha firmado de parte de la Santa Sede y Riad Al-Malki, ministro de Asuntos Exteriores, ha firmado de parte del Estado de Palestina.
Por primera vez el Acuerdo "incluye un reconocimiento oficial de Palestina como Estado por parte de la Santa Sede, como signo de reconocimiento del derecho del pueblo palestino a la autodeterminación, a la libertad y a la dignidad en un propio Estado independiente libre de las cadenas de la ocupación", tal y como ha explicado el ministro palestino. Asimismo, ha indicado que apoya también "la visión a favor de la paz y de la justicia en la región, de acuerdo con el derecho internacioanl, sobre bases de dos Estados, que viven uno junto al otro en paz y seguridad sobre la base de las fronteras de 1967".
El Acuerdo está formado por un preámbulo y 32 artículos distribuidos en 8 capítulos. Asimismo, en él se abordan “aspectos esenciales de la vida y de la actividad de la Iglesia en el Estado de Palestina, reafirmando al mismo tiempo el apoyo por una solución negociada y pacífica de la situación en la región”, anuncia el comunicado distribuido por la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Dicho Acuerdo, entrará en vigor una vez que ambas partes notifiquen por escrito que están satisfechas con los requisitos constitucionales o internos para que el Acuerdo entre en vigor.
En el discurso realizado por el arzobispo Gallagher en el momento de la firma, ha definido el Acuerdo como una “etapa importante en el camino de las buenas relaciones que existen felizmente desde hace tiempo entre las partes”.
Asimismo, ha manifestado su deseo de que el Acuerdo pueda de alguna manera constituir un “estímulo para poner fin de forma definitiva al problemático conflicto israelí-palestino, que continúa provocando sufrimiento a ambas partes”. Igualmente espera que “la deseada solución de dos Estados se convierta en realidad cuanto antes”. Al respecto ha asegurado que el proceso de paz solo puede progresar a través de la negociación directa entre las partes con el apoyo de la comunidad internacional. “Esto requiere realmente decisiones valientes, pero también será una gran contribución a la paz y a la estabilidad de la región”, ha observado.
A propósito del Acuerdo apenas firmado, monseñor Gallagher ha indicado que está satisfecho por “el reconocimiento jurídico que se establece claramente” y por “las garantías que se ofrecen a la actividad de la Iglesia católica y de sus instituciones”.
En el contexto complejo de Oriente Medio, donde en algunos países los cristianos han sufrido persecuciones, este Acuerdo “ofrece un buen ejemplo de diálogo y de colaboración”, ha expresado. Por esta razón, monseñor Gallagher desea que sirva de modelo para otros países árabes y de mayoría musulmana.
Por su parte, Riad Al-Malki, ha manifestado que la firma histórica de este Acuerdo “no hubiera sido posible sin el apoyo y el compromiso personal del presidente Abbas y sin la bendición de Su Santidad el papa Francisco hacia nuestros esfuerzos al respecto”.
Sobre el Acuerdo, ha señalado que “sus disposiciones abrazan la visión común de las dos partes a favor de la paz y de la justicia en la región, la protección de las libertades fundamentales, el estatus y la protección de los Santos Lugares, y los medios para reforzar y promover la presencia y las actividades de la Iglesia católica en el Estado de Palestina”.
Por otro lado, el ministro ha señalado que se está viviendo un momento en el cual “el extremismo, la violencia bárbara y la ignorancia amenazan el tejido social y la identidad cultural de la región y seguramente del patrimonio humano”. En este escenario --ha asegurado Al-Malki-- el Estado de Palestina reitera su compromiso para combatir el extremismo y promover la tolerancia, la libertad de conciencia y de religión y salvaguardar de la misma forma los derechos de todos sus ciudadanos.
Este Acuerdo “consolida y mejora las circunstancias actuales, en las que la Iglesia católica goza de derechos, privilegios, inmunidad y libre acceso. Confirma la posición de la Iglesia como importante fuente de apoyo de la vida de muchos palestinos”, ha precisado el ministro.
Publicar un comentario