Cáritas lamenta la falta de voluntad política de la UE para ayudar a los refugiados

Con motivo de la celebración del Día Mundial del Refugiado, la organización hace un llamamiento a la defensa de los derechos humanos y la solidaridad

Madrid, 20 de junio de 2015 (ZENIT.org) Staff Reporter | 0 hits

Cáritas Española ha señalado que lo que los refugiados necesitan con mayor urgencia es solidaridad y ha denunciado la "falta de voluntad" de los responsables europeos para atender a los refugiados que llegan a la UE, con motivo de la celebración este sábado del Día Mundial del Refugiado.

"La falta de voluntad de los responsables europeos para escuchar y ver el sufrimiento de los migrantes y refugiados que llegan a nuestras fronteras, supone matar el sueño de una Unión Europea líder en derechos humanos y la solidaridad", ha subrayado la organización eclesial en un comunicado.

Así, se ha unido al llamamiento de Cáritas Europa para reprochar a la UE que "se esconde cada vez detrás de más vallas, de una presencia militar cada vez más fuerte en las fronteras y de una retórica política cada vez más dura".

"¡Es hora de parar todo esto! ¡Los refugiados y los migrantes no son criminales! Son personas necesitadas de ayuda, tan desesperadas que están dispuestas a arriesgar sus vidas durante un terrible viaje", ha advertido la organización. "¿Por qué? Porque si se hubieran quedado se habrían muerto de todos modos", ha añadido en su nota. 

En este sentido, el secretario general de Cáritas Europa, Jorge Nuño ha matizado que la solidaridad que necesitan "desesperadamente" no es solamente la solidaridad entre los Estados miembros del norte y los países del sur, sino también "entre las personas".

"Queremos escuchar a los líderes europeos decir a los refugiados: sí para salvar vidas, sí a la reubicación, al reasentamiento y la solidaridad", ha enfatizado, al tiempo que ha llamado a los líderes de la UE a adoptar una postura de "solidaridad, protección" y defensa de la dignidad humana de los refugiados y los migrantes.

La acción global de Cáritas Española con los refugiados se extiende por Centroáfrica, Palestina, Ucrania, Siria, Burundi e Irak, entre otros países, donde contribuye a "mantener la dignidad de las personas aun en los contextos más difíciles, con especial atención a las víctimas más vulnerables, como la infancia".