La Iglesia católica recuerda hoy, 28 de julio, a San Pedro Poveda Castroverde, sacerdote, educador, escritor y fundador de la institución Teresiana; asesinado por odio a la fe durante la guerra civil española.
Pedro José Luis Francisco Javier Poveda Castroverde nació en Linares, Jaén (España) el 3 de diciembre de 1874, ingresó al seminario de su ciudad natal y concluyó sus estudios en Guadix, lugar donde fue ordenado sacerdote en 1897.
La vida sacerdotal de San Pedro Poveda se caracterizó por su intenso trabajo humanista y pedagógico, tanto dedicado a la formación de los más necesitados como a la formación del laicado comprometido con los valores cristianos. Participó, asimismo, en la formación y asistencia a los peregrinos de la Iglesia Colegial de Covadonga (Asturias) mientras ocupó allí, en 1906, el cargo de canónigo.
A partir de 1911, el P. Poveda dio marcha a un proyecto interesantísimo: se dedicó a la fundación de academias y centros pedagógicos que posteriormente darían forma a la Institución Teresiana. La Institución Teresiana (de siglas I.T.) es una asociación internacional de profesionales laicos católicos con aprobación pontificia otorgada por el Papa Pio XI, el 11 de enero de 1924.
Sacerdote prudente y audaz, pacífico y abierto al diálogo, tuvo que enfrentar los aciagos tiempos de la guerra civil española iniciada en 1936, en cuyo marco se desarrolló una terrible persecución contra los católicos. Así, el P. Poveda fue detenido el 27 de julio de ese mismo año en su casa en Madrid, ubicada en la calle Alameda Nº 8. Horas después, durante la madrugada del 28 de julio, entregó su vida por causa de la fe siendo fusilado en el Cementerio de la Almudena.
“Soy sacerdote de Cristo”, afirmó con contundencia San Pedro Poveda a quienes lo detuvieron y condenaron al martirio.
Fue canonizado por San Juan Pablo II el domingo 4 de mayo de 2003, durante la visita del Santo Padre a España.
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