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El Obispo, los sacerdotes, los religiosos y los fieles de la Diócesis de Santa Rosa de Osos (Colombia) manifestaron su “viva cercanía y solidaridad a los hermanos y hermanas de Ituango, por la situación de emergencia humanitaria que están afrontando a causa del desastre natural” de los últimos días y del desplazamiento forzado al que son sometidos por parte de grupos armados ilegales.
Según informa el diario colombiano El Espectador, la situación humanitaria en el municipio de Ituango es muy compleja. Hasta el momento hay al menos 3.721 personas desplazadas a causa de la violencia, “el desplazamiento más grande en la historia del departamento”, según el procurador regional Luis Fernando Bustamante.
El desplazamiento es consecuencia de la lucha por el territorio que hay en la zona entre el frente 18 de las FARC y el grupo paramilitar del Clan del Golfo.
A esa situación se suma los desastres causados por la temporada de lluvias. Las precipitaciones en los últimos días han causado derrumbes que tienen incomunicado al municipio con el resto del departamento de Antioquia.
La vía de acceso terrestre desde Medellín, capital del departamento y ubicada a unas 8 horas en auto, ha sido bloqueada por los derrumbes y tomará unos 20 días desbloquearla. Por ello se trabaja en una vía alterna de comunicación.
En un comunicado el 26 de julio, la Diócesis de Santa Rosa de Osos, liderada por Mons. Elkin Álvarez, explicó que están asegurando “el acompañamiento a las víctimas de la tragedia y a los desplazados, con los sacerdotes y agentes pastorales”.
Asimismo, se “ha dirigido a la población un equipo de la Pastoral Social diocesana y se ha dispuesto para los afectados una ayuda del fondo de la campaña de Comunicación Cristiana de Bienes”.
La diócesis exigió además a “los grupos armados ilegales que detengan sus amenazas y presiones sobre las comunidades rurales para que abandonen sus territorios”.
“Este atentado, que se suma al sufrimiento por la tragedia natural, es un acto de inhumana crueldad, que hiere gravemente la dignidad y los derechos de los más pobres y vulnerables”, lamentó el texto.
Tras solicitar a las autoridades que sigan ofreciendo la ayuda básica necesaria para la población en Ituango y que se “priorice la situación de esta zona del norte antioqueño, que reclama urgentemente programas y acciones”, el texto recordó que esto sirve “no solo para terminar con la emergencia, sino, y sobre todo, para lograr la reconciliación y la paz”.
Finalmente convocan a una colecta para el próximo domingo 1 de agosto.
“Invitamos a todas las comunidades parroquiales y a las instituciones de la Diócesis de Santa Rosa de Osos a motivar en estos días y a realizar el próximo domingo, 1 de agosto, una colecta especial para aliviar en algo el dolor de nuestros hermanos de Ituango”, concluyó el comunicado.
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