A raíz de un nuevo debate sobre ideología de género, el Instituto de la Familia y la Vida Juan Pablo II de la Universidad Católica de Salta (Ucasal), propuso un “modelo de reciprocidad” para contrarrestar el reduccionismo impuesto por las ideologías imperantes.
El 27 de agosto, la entidad emitió un comunicado titulado “Qué se entiende por Ideología de género y sus principales implicancias socioculturales”, a raíz de la propuesta de un proyecto que busca modificar la ley de educación de Salta imponiendo los conceptos de “perspectiva de género y nuevas masculinidades”.
La institución explica que por un lado, la ideología de género “diluye la identidad del ser humano, varón y mujer, proponiendo un modelo neutro, ajeno a la realidad. La persona es considerada un mero producto cultural, una pura autoconstrucción”.
Y por otra parte, propone que “tanto los roles sociales, como la misma dualidad varón-mujer, son una elaboración cultural, producto exclusivo de la cultura patriarcal”.
“Frente al modelo patriarcal y al modelo propuesto por la ideología de género, se advierte la necesidad de desarrollar un tercer modelo, que responda más adecuadamente a la realidad y a la experiencia humana”, sostiene la institución salteña.
“Dicho modelo ha sido denominado de la reciprocidad, complementariedad y corresponsabilidad varón-mujer. Dicha línea parte del respeto a la dignidad y a los derechos humanos del varón y la mujer. Asimismo, intenta hacer compatible la igualdad y la diferencia entre ambos”.
“El modelo de la reciprocidad intenta superar dos tipos de reduccionismo: el biologicista y el culturalista, integrando, armónicamente, lo recibido y lo construido, la naturaleza y la cultura, la biología y la libertad”, agrega.
“La experiencia muestra que, cuando masculinidad y feminidad actúan complementariamente, se produce una gran fecundidad en todos los ámbitos de la vida: la familia, el campo laboral, cultural, político”.
El Instituto de la Familia y la Vida Juan Pablo II también enumeró una serie de rasgos característicos de la ideología de género entre los que menciona la “completa desvinculación entre los conceptos de sexo (biología) y género (cultura)”.
Además advirtió de los peligros que implica el “reconocimiento, social y jurídico, de los denominados ‘nuevos derechos humanos’”, entre ellos los supuestos derechos sexuales y reproductivos (que incluyen el aborto) y de identidad de género, entre otros puntos.
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