Grupos provida de Nueva Zelanda colocaron este miércoles 13.285 zapatitos de bebés frente al Congreso de la Nación, que representa el número de niños que fueron abortados en 2017.
En Nueva Zelanda el aborto está permitido cuando por lo menos médicos certifican que se trata de un caso de riesgo para la vida de la madre (incluso más allá de las 20 semanas), afección física o mental, o discapacidad del bebé. De lo contrario se estaría infringiendo la Ley de Delitos de 1961.
La plataforma provida Voice for Life creó la exhibición para protestar contra el Gobierno que ha pedido recientemente a la Comisión de Derecho que considere algunos cambios en la ley del aborto.
Los cambios incluyen que esta práctica sea excluida de la Ley de Delitos y se le considere como un problema de salud pública. Esto permitiría que se pueda abortar por cualquier motivo durante los nueve de embarazo.
En los últimos cuarenta años 500 mil bebés fueron abortados legalmente en Nueva Zelanda.
“Estamos haciendo esto para mostrar al público y al Parlamento que estamos realmente preocupados por las vidas perdidas”, explicó Jacqui de Ruiter, presidenta nacional de Voice for Life.
El grupo provida informó que los zapatitos de la exhibición fueron tejidos en todo el país. Hasta la fecha han recibido más de 15 mil y al finalizar la campaña serán donados a las madres necesitadas.
“Debe haber una mejor manera de avanzar para las madres y los bebés, y queremos formar parte de esa búsqueda”, dijo Voices for Life en un comunicado.
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