Esta semana, más 700 personas se reunieron en Glasgow (Escocia) para salir en la procesión anual de antorchas en conmemoración por las millones de vidas perdidas por el aborto en el Reino Unido desde la aprobación de la Ley del Aborto de 1967.
Yesterday evening a record number of over 700 pro-lifers attended the annual SPUC Torchlight Procession in Glasgow's George Square. Thank you very much to all of you who braved the cold to be a voice for the voiceless. Your witness to Life is seen by many! 🕯 🏴󠁧󠁢󠁳󠁣󠁴󠁿 pic.twitter.com/lDKccmywWh
— SPUC Pro-Life (@spucprolife) October 29, 2021
La procesión de las antorchas es una vigilia pacífica organizada cada año en octubre por el grupo provida Sociedad para la Protección de los Niños no nacidos (SPUC, por sus siglas en inglés). Éste conmemora el aniversario de la legislación que introdujo el aborto en Inglaterra, Escocia y Gales.
Los participantes se reunieron en la noche del 28 de octubre en George Square y rezaron el Rosario con la guía del P. Ryan Black, del clero de la diócesis escocesa de Paisley. La procesión a la luz de las velas se abrió paso por el corazón de la ciudad hasta la Catedral de San Andrés, donde se celebró una Misa.
En los 54 años transcurridos desde la legalización del aborto, 9.789.238 bebés han sido asesinados.
Un número récord de abortos tuvo lugar en Inglaterra y Gales en 2020, según estadísticas publicadas en junio de 2021. Las cifras mostraron que hubo 210.860 abortos, el número más alto desde que se introdujo la ley.
Michael Robinson, Director Ejecutivo de Asuntos Públicos y Servicios Legales de SPUC, ha criticado las cifras y las calificó como “un ultraje nacional”.
Sin embargo, Robinson aseguró que “no perderemos la esperanza”.
“En el 54° aniversario desde la legalización del aborto, fue muy alentador ver una participación tan grande en nuestra noche de conmemoración. El movimiento provida no perderá la esperanza. Juntos, seremos una voz para los que no tienen voz y continuaremos trabajando hasta que se restaure una cultura de la vida”, añadió.
Charlie McCluskey, organziador de la procesión en Glasgow, comentó que la procesión de este año fue un éxito y que “es fácilmente el más concurrido en la historia del evento”.
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