Tres cristianos de Pakistán que trabajaban en la construcción de una capilla en Sahiwal, en la provincia del Punjab, fueron atacados por un grupo de personas que querían paralizar la construcción.
Según informó la agencia vaticana Fides, en los días pasados el grupo de musulmanes ya había agredido a los cristianos que manifestaron su intención de construir una pequeña capilla en una zona del distrito de Sahiwal, en donde viven unos 120 cristianos.
Gulzar Masih, uno de los cristianos locales, dueño de un terreno del que tenía el certificado legal de propiedad, pretendía erigir una sencilla capilla para el culto de los cristianos, que actualmente deben recorrer varios kilómetros para ir a una iglesia.
El musulmán Muhammad Liaqat se opuso a la construcción poniendo en duda la propiedad del terreno y rechazando la idea de tener una capilla en el pueblo. Entre Gulzar y Muhammad comenzó una pelea que finalizó con la llegada de la policía y la detención de ambos, posteriormente puestos en libertad.
Ese mismo día, Mohammad Liaquat con sus cómplices, esta vez equipados con armas de fuego y cortantes, comenzaron a demoler el muro que los cristianos habían construido para edificar la capilla.
Los cristianos llegaron para evitar la demolición, pero el grupo musulmán abrió fuego hiriendo gravemente a varios de los fieles.
La ONG CLAAS, que da ayuda legal a los cristianos de ese pueblo, asegura que se trata de “una patente violación del derecho al culto de los fieles y de un abuso realizado por los ciudadanos musulmanes que usan la violencia indiscriminada contra las minorías religiosas”.
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