Tres sacerdotes, por medio de videos subidos a redes sociales, nos explican cuál es el significado de la Corona de Adviento y como este símbolo nos ayuda a vivir de manera más adecuada este tiempo litúrgico, en el que nos preparamos para el nacimiento del Niño Jesús.
Este 2019 el Adviento comienza el domingo 1 de diciembre, y muchas familias y parroquias han empezado a colocar sus coronas, este círculo formado por ramas verdes, que suele ir acompañado de adornos o lazos rojos, con cuatro velas que se encienden de una en una cada domingo de este tiempo litúrgico.
Este símbolo que nos ayuda a preparar el corazón para la Navidad, tiene varios significados:
1. La forma circular
El sacerdote de la Arquidiócesis de Maracaibo (Venezuela), P. Silverio Osorio comenta en su cuenta de Instragram que la corona tiene la forma circular para representar el “amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin”.
El sacerdote señala que el círculo nos muestra que nuestro amor a Dios y al prójimo nunca debe terminar.
Asimismo, el P. José de Jesús Aguilar Valdés, señala en un video de Youtube, que este círculo refleja “la eternidad que Jesucristo nos trajo con su nacimiento, muerte y resurrección”.
2.- Ramas Verdes
El P. Aguilar comenta que las ramas verdes de la corona nacen del pino, que significa la inmortalidad, pues “mientras todos los árboles pierden su color y su follaje durante el invierno, el pino mantiene siempre sus ramas verdes”.
El verde también es un color de “esperanza y vida”, señala el P. Osorio. “Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas”, agregó.
“El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre”, comenta el P. Osorio.
3.- Velas
El P. Victor Jimenez Glez indica que las velas “representan que Cristo es la luz del mundo”, quien nos “ayuda acompañándonos en medio del dolor y las tristezas”, eliminando el frío que provoca el pecado.
“Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas en la corona”, comenta el P. Osorio.
Esta luz muestra que el único que puede regalarnos la vida y la felicidad es Jesús, señala el P. Jimenez. “Así como los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo, las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos”, asegura el P. Osorio.
El P. Aguilar comenta que no hay un color específico para las velas, pero “se acostumbra a usar el morado, color que usa la Iglesia en Adviento y en Cuaresma como signo de conversión, arrepentimiento y penitencia”
Además, “el color morado puede irse degradando o pasar al rojo, al rosa y al blanco, para significar la paulatina transformación interna”, señala el P. Aguilar, quien aconseja que las velas se vayan encendiendo en familia, junto a la lectura u oración, “así la corona de adviento es un signo que nos ayuda a recordar que la Navidad es algo más que adornos, regalos o una fiesta social”.
4.- Adornos y frutos
El P. Osorio señala que el listón rojo y los adornos coloridos que puede tener la corona representan “la demostración del amor del Señor en la Cruz. Es la alegría que nos trae el Salvador”.
También, pueden ser un reflejo de las “buenas obras” que realiza el hombre, señala el P. Aguilar.
Finalmente, los tres sacerdotes concuerdan que esta preparación no es solo para recibir al Niño Jesús, sino para nuestro encuentro con Cristo, “sea en nuestra muerte o en el día del juicio final”, concluye el P. Aguilar.
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