El Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, inauguró el nuevo curso académico del Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II para las Ciencias del Matrimonio y de la Familia con una lección magistral en la que enseñó que la familia “es una escuela de libertad y de paz”.
Explicó que la familia “constituye la matriz insustituible de la composición humana de los efectos y de la libertad responsable, de la comunidad y de la convivencia pacífica”.
Defendió que “no se puede negar que la familia se encuentre hoy sometida a una presión de conformismo y de una cultura de la disgregación, que la debilita profundamente”.
Frente a ese riesgo, la familia cristiana “es la mediadora mayéutica normal de la misión de testimonio y amor del poder de la gracia que reestablece la alianza del hombre y de la mujer, capaz de llevar unos el peso de los otros”.
“Esta subsidiariedad se vuelve hoy crucial para la restitución de la plena transparencia y verdad al mandato de la reconciliación con Dios”.
En ese sentido, afirmó que “el ministerio de la familia establece sus raíces en el acto creador de Dios, en el cual la diferencia entre el hombre y la mujer está destinada a la especial misión de una alianza a la cual se ha confiado el trabajo del amor que plasma el mundo y la historia”.
“Sobre esas raíces se estableció el misterio y el ministerio eclesial de la familia, llamada al Evangelio y a trascender su misma dimensión creador y dirigida a convertirse en signo y en realidad de la acción de salvación y de la promesa de cumplimiento que se erradica en el misterio del Hijo de Dios hecho hombre”.
Publicar un comentario