A nombre de todos los obispos de Polonia, el presidente de la Conferencia Episcopal, Mons. Stanisław Gądecki, pidió al Papa Francisco que se proclame a San Juan Pablo II como Doctor de la Iglesia y patrono de Europa.
La solicitud fue presentada este martes 22 de octubre de 2019, día de la fiesta de San Juan Pablo II, durante el congreso del movimiento “Europa Christi” realizado en el país. Además, recibió el apoyo del Arzobispo Emérito de Cracovia, Cardenal Stanisław Dziwisz, que sirvió durante 40 años a Juan Pablo II como su secretario personal.
“El pontificado del Papa polaco estuvo lleno de decisiones revolucionarias y eventos importantes que cambiaron la faz del papado e influyeron en el curso de la historia europea y mundial”, escribió Mons. Gądecki en una carta enviada al Papa Francisco.
Asimismo, enfatizó que “la riqueza del pontificado de San Juan Pablo II, llamado por muchos historiadores y teólogos Juan Pablo II el Grande, surgió de la riqueza de su personalidad: poeta, filósofo, teólogo y místico, que se desarrolló en muchas dimensiones, desde el trabajo pastoral y la enseñanza, hasta llevar a la Iglesia Universal al testimonio personal de la santidad de vida”.
Mons. Gądecki destacó que el gran logro del pontificado de San Juan Pablo II, de 1978 a 2005, fue su contribución a la liberación de su patria del dominio comunista y a la restauración de la unidad en Europa después de más de 50 años de división, simbolizada por la Cortina de Hierro.
“Después del anuncio unificador y cultural del Evangelio por parte de los santos Cirilo y Metodio y San Adalberto, más de mil años después, los frutos de sus actividades, no solo en términos sociales sino también religiosos: encontraron a su protector y sucesor en la persona del Papa polaco”, comentó el presidente de los obispos polacos.
El Cardenal Dziwisz apoyó la solicitud de Mons. Gądecki y dijo que “el legado del Papa Wojtyła es una síntesis rica, versátil y creativa de múltiples caminos del pensamiento humano”.
“No hay duda de que sigue siendo, y lo seguirá siendo por mucho tiempo, un elemento esencial de un proyecto general de renovación cultural a escala mundial. En mi opinión, son al mismo tiempo las razones principales por las que Juan Pablo II debe ser reconocido como Doctor de la Iglesia y copatrono de nuestro hogar europeo”, agregó el Cardenal.
Durante el congreso, el Arzobispo Emérito de Cracovia dijo que la solicitud no significa regresar al pasado, sino que está seguro de que las enseñanzas de Juan Pablo II podrían ayudar a Europa a salir de su actual “crisis cultural”.
“El pensamiento de Juan Pablo II es de hecho completamente moderno, original y creativo, sin dejar de ser noblemente clásico. Este, el difícil acto de equilibrio de Wojtyla entre la tradición y la modernidad, ha aportado un gran soplo de aire fresco a la vida de la Iglesia y, a través de él, a los espacios universales más amplios de cultura, política y ciencia ampliamente entendidas”, acotó.
“En este sentido, el Santo Papa se convirtió en un verdadero maestro y doctor de la Iglesia y un guardián importante de los valores europeos, que son los cimientos indelebles de la civilización moderna”, concluyó el Cardenal Dziwisz.
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