Una valiente madre no solo le dijo no al aborto de su bebé producto de una violación, sino que perdonó a sus agresores, dio en adopción a su bebé y guardó su fotografía durante 48 años, hasta el día que se volvieron a encontrar.
Esta es la increíble historia de la conferencista y cantante provida estadounidense Juda Myers, que se enteró cómo fue concebida en 2003 y, que dos años después, en 2005, conoció a su madre biológica y descubrió que habían sido ocho los hombres que la violaron y golpearon hasta dejarla casi muerta.
La historia de la concepción de Juda fue un misterio para ella por 48 años, hasta que decidió buscar la verdad.
En su cuenta de Facebook, Juda contó el pasado 21 de agosto que su madre descubrió su embarazo tres meses después de sufrir la violación. Su progenitora tenía 22 años y sus padres se sentían tan disgustados por el embarazo que le insistieron que abortara.
“Eso fue en 1956 cuando el aborto no era ‘legal’. Una malvada doctora le dijo ‘puedo ocuparme de eso’, pero me encantó la forma en que mi mamá lo respondió. Dijo con voz fuerte: ‘¡Tú no te vas a hacer cargo de ‘eso’! ¡‘Eso’ es mi bebé!’”, relata.
“Me encantaba lo fuerte que era mi madre. No estaría viva si ella no hubiera sido fuerte”, añadió.
Juda nació en 1957 en un hospital católico y la organización de ayuda humanitaria Catholic Charities ayudó a su madre a encontrar un hogar que la acogiera en Shreveport, Luisiana.
Permaneció en la casa hogar por dos semanas, donde todos los días un trabajador llevaba a la pequeña Juda para que su madre pudiera pasar tiempo con ella.
A los tres meses, la pequeña fue adoptada y el mismo trabajador del hospital le envío una fotografía de su pequeña, diciéndole que no se preocupara porque había sido adoptada por una buena familia.
“48 años más tarde conocí a mi madre biológica y todavía estaba sosteniendo esa foto mía. Nada parecido a lo que dice la sociedad sobre las madres que ni siquiera pueden ver a una niña concebida por violación porque les recordaría ese evento”, continuó Juda.
Después de escuchar todo lo que su madre había pasado, Juda lloró, pero su madre se mantuvo fuerte, diciendo: “Cariño, deja de llorar. He perdonado a esos hombres y mira lo que Dios ha hecho. Él te trajo de vuelta a mí. Dios es fiel”.
Las dos llegaron a tener una relación cercana durante los siguientes siete años, hasta que su madre murió.
“Estuvo conmigo cuando vine a este mundo y yo fui la última persona con ella cuando se fue”, dijo.
La historia de su madre inspiró a Juda a fundar una organización dedicada a ayudar a mujeres embarazadas por violación. Choices 4 Life ofrece ayuda financiera y emocional con el objetivo de restaurar la dignidad y el honor de mujeres y niños afectados tras la concepción por una violación.
“El mal sucede, pero Dios es aún más grande. Para aquellos que tienen ojos para ver, que vean la gloria de Dios”, concluyó Juda en su escrito.
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