ROMA, 10 Dic. 15 (ACI).- La comunidad cristiana en Tierra Santa inició los preparativos para festejar el nacimiento de Jesús, con la ceremonia del encendido del árbol de Navidad en Belén, donde también se recordaron a las víctimas de los recientes enfrentamientos entre israelíes y palestinos.
La ceremonia se realizó el sábado en la Plaza del Pesebre, a los pies de la iglesia de la Natividad, y asistieron unas cuatro mil personas, entre ellas la alcaldesa cristiana Vera Baboun, quien pronunció un emotivo discurso al recordar a los 133 fallecidos -114 palestinos y 19 israelíes- en los ataques y enfrentamientos iniciados en octubre pasado.
“Si bien en la celebración de la Navidad festejamos también la vida, la alegría y la esperanza, pero también debemos hacerlo en un espíritu de compasión con los que sufren y de respeto a nuestros fallecidos”, afirmó.
“La situación es crítica, pero debemos seguir gritando más fuerte nuestro mensaje de paz, el mensaje de un pueblo que, sin embargo, no conoce la paz”, añadió.
Según informó este miércoles el Patriarcado Latino de Jerusalén, Su Beatitud Fouad Twal presidirá la tradicional procesión del 24 de diciembre: saldrá de la ciudad, hará una parada en el Monasterio de Mar Elías, luego cruzará el muro de separación y finalmente llegará a Belén.
“Es bueno ver que aún se realicen estas tradiciones, a pesar de la situación”, indicó el rector del Seminario de Beit Jala, P. Jamal Khader, y afirmó que “a pesar del muro, estas dos ciudades, la del nacimiento de Cristo y la de su muerte y resurrección, son inseparables”.
Respecto a la presencia de la comunidad cristiana en Tierra Santa, el sacerdote señaló que más que el número de fieles que la conforman, “la pregunta debería ser: ¿Qué tipo de presencia deberíamos tener?, ¿qué testimonio deberíamos dar?”.
En sus declaraciones, difundidas por el Patriarcado Latino, el P. Khader expresó su preocupación frente al aumento del extremismo judío, personalizado por el grupo Lehava, que ha realizado ataques y actos de vandalismo contra cristianos e incluso lugares de culto musulmanes.
“Estos ataques nos molestan mucho y peor es la impunidad de sus ejecutores. Estos criminales son conocidos por las autoridades, pero no son objeto de seguimiento”. “¿Qué estado de derecho existe en Israel y sobre todo para quién?” “Estos grupos amenazan la convivencia entre las religiones, el Estado de Israel debería hacer algo y proteger sobre todo a sus ciudadanos”, denunció.
Un ejemplo fue la manifestación de un grupo de miembros de Lehava el pasado 29 de noviembre frente a la YMCA de Jerusalén, contra de la celebración de bazares navideños, denunciando la “matanza de judíos” y presionando a los cristianos a abandonar la Tierra Santa.
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