Si se busca en Pinterest “cómo celebrar el Adviento”, aparecerán tutoriales sobre cómo hacer un calendario de Adviento, como hacer tu propia corona, el Árbol de Navidad y diversas ideas del tipo “hazlo tú mismo” para crear adornos, por ejemplo, para esta época.
Pareciera que, en los últimos años, el tiempo de penitencia como preparación para la Navidad se hubiera convertido en una época para hacer manualidades, gracias a sitios web como Pinterest o los tutoriales.
Si bien estas manualidades y actividades pueden contribuir en cierto modo a la celebración de la Navidad, es importante que estas no sean una distracción sobre el verdadero propósito de este tiempo: la preparación para el nacimiento del Hijo de Dios.
Al respecto, el P.Mike Schmitz, capellán del Centro Newman de la Universidad de Minnesota Duluth, dijo a ACI Prensa que una de las cosas que se han pasado por alto del Adviento es que “es un tiempo de penitencia, y como tal la Iglesia nos pide hacer oración, ayuno y limosna”.
“Es algo así como el aguafiestas del Adviento porque uno se dice: ‘no puedo divertirme porque estamos en un tiempo de penitencia’”.
Sin embargo, el hecho de que sea un tiempo de penitencia no significa que este tiene que ser sombrío. “Pienso que hay buenas maneras para que una persona o una familia puedan hacer de la oración, el ayuno y la limosna, parte de la preparación para Navidad. No tiene que ser una experiencia severa”, explicó.
El P. Schmitz indicó que la manera más simple que un católico tiene para prepararse para la Navidad es confesarse. “En el Adviento no solo se pide a los fieles que se preparen para celebrar la Navidad, sino que también se preparen para encontrarse con Jesús en el fin de los tiempos”, señaló.
Prepararse en familia
Para Kathryn Whitaker, del blog “Team Whitaker” (Equipo Whitaker) vivir el Adviento tiene que ver con saber lo que se puede hacer con la familia.
“Hay miles y miles de ideas preciosas en Pinterest y en otros lugares, pero creo que uno tiene que ver que encaja con su familia y no sentirse mal porque otro lo hace diferente”, manifestó.
En un intento de marcar de nuevo el frenesí de la mañana de Navidad, indicó que su familia comenzó a buscar formas de servir a otros y de agradecer por lo que tenían en las semanas previas.
“Creo que para nosotros, sólo se trata de esparcir un poco de amor, especialmente en estas cuatro semanas, en cada cosa que hacemos”.
Los Whitaker “adoptan” cada año a una familia que pasa necesidad para darle regalos y comida, o donan obsequios para el Brown Santa, una tradición que recibe su nombre de los uniformes marrones que utilizan los miembros del condado de Trevis, de la Oficina del Sheriff de Texas (Estados Unidos), que asisten a los vecinos más desfavorecidos,
especialmente en Navidad.
También como parte del Adviento, aparte de la Misa y la confesión, enciende con los niños del nido donde trabaja una corona de Adviento, hecha de papel tejido y papel higiénico, y tiene un Árbol de Jesse, una antigua tradición que se trata de decorar un árbol con
ornamentos que representan la historia de la salvación.
Con el paso de los años, Kathryn y su familia han adaptado la temporada de adviento a su vida familiar. Por ejemplo, el año en que ella y su esposo trajeron a su hijo prematuro del hospital a su casa, apenas consiguieron armar el árbol de Navidad y decorarlo con algunos
adornos.
“Con eso estuvo bien, y sabiendo que el Adviento u otro tiempo litúrgico se aproxima, tu puedes hacer más o menos”, dijo.
¿Y si cambiamos un poco el orden?
Así como Whitaker, Bonnie Engstrom del blog “A Knotted Life” (Una vida enredada) dijo que la mejor forma para que una familia viva el tiempo de Adviento es “ver las opciones que pueden generar lecciones significativas y recuerdos duraderos. Después tiene que ver si funciona y confiar en que estás haciendo un buen trabajo”.
Hace algunos años, los Engstrom han reducido considerablemente sus actividades de Adviento y se han enfocado en hacer la corona y en recordar algunos santos. Incluso en lugar de colocar luces, beber chocolate y mirar películas navideñas como lo hacen los demás, esta familia posterga esas actividades para después de ese día.
“Esto ha reforzado enormemente la Navidad después del 25 de diciembre y ha traído mucha más paz y alegría a nuestra casa, al mismo tiempo que reduce el estrés ", dijo ella.
Bonnie señaló que involucra más a sus hijos en la fe con actividades divertidas como dejar que armen el belén, añadan adornos al árbol de Jesse y que celebren el día de San Nicolás.
También enseñan a sus hijos que celebrar el Adviento es importante para crecer en su relación con Dios.
“El silencio, la belleza simple y el centrarse en la preparación son las cosas que me ayudaron a aquietar mi vida interna y externa para que Dios pudiera hablarme”, comentó.
Traducido por María Ximena Rondón. Publicado originalmente en CNA
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