ROMA, 06 Jun. 13 / 11:29 am (ACI ).- El Arzobispo de Bombay, Cardenal Oswald Gracias, informó al Vaticano que los católicos de la India se unieron a la Adoración Eucarística internacional del 2 de junio junto al Papa Francisco con la particular intención de pedir por el fin de la violencia contra las mujeres del país.
La violencia en India conmocionó al mundo cuando hace unos meses, falleció una joven después de ser violada por seis hombres en un medio de transporte público.
"Nuestras mujeres son víctimas de violencia doméstica indescriptible. Homicidio femenino e infanticidio femenino continúan sucediendo. Orando por estas intenciones, hemos sentido al Papa Francisco muy cercano al sufrimiento de la gente de la India", explicó el Cardenal Gracias en una nota enviada a la agencia Fides.
"Unidos con el sucesor de Pedro adorando a Jesús vivo en muchos lugares de la India, miles de personas, entre ellas muchos jóvenes, han dado testimonio del inmenso amor de Cristo y de las riquezas de este Año de la Fe", añadió.
El Cardenal Gracias presidió la Adoración en la Catedral de Bombay y compartió con los fieles su "preocupación por los problemas de la India, por una misión que sea más eficaz contra la pobreza y por la dignidad de la mujer y contra la violencia, temas de actualidad en nuestro país".
La nota recuerda los esfuerzos de la Iglesia por los más pobres, a través de los servicios sociales, la asistencia y la educación. "Sin embargo, el camino por recorrer aún es largo: la mentalidad patriarcal tiene que cambiar, tenemos que acabar con la discriminación de género y dar igualdad de dignidad a las mujeres", indica.
El Arzobispo recordó que estos abusos han alcanzado también a miembros de la Iglesia como la religiosa Meena Barwa, que padeció una grave agresión en Kandhamal, Orissa, en el año 2008, y denunció que los violadores siguen todavía en libertad, "algo que toca un punto profundo para nosotros".
La adoración se llevó a cabo en el Centro Pastoral Dibyajyoti, en el distrito de Kandhamal, en Orissa, donde la violencia sexuales se han desatado con mayor violencia contra muchas mujeres durante los linchamientos anti-cristianos que amenazan especialmente la zona.
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