El Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, Cáceres, (España) acogió el pasado 19 de julio la presentación de la credencial del peregrino a Guadalupe. Se trata de un documento que certifica el recorrido hecho por los peregrinos a través de uno de los 23 diferentes itinerarios disponibles, para llegar ante la imagen de la “Morenita de las Villuercas”.
La iniciativa de lanzar esta credencial fue realizada de manera conjunta por la Archidiócesis de Toledo y el Monasterio de la Puebla de Guadalupe. La credencial se puede conseguir en el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, en las sedes de los obispados de Toledo, de Mérida-Badajoz, de Coria-Cáceres, de Plasencia, y también en la Basílica de Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina.
El Arzobispo de Toledo, Mons. Francisco Cerro Chaves, subrayó que la presentación de esta credencial es “un momento histórico porque no existía credencial oficial del peregrino”.
Mons. Cerro también aseguró que con esta iniciativa ”se trata de integrar y sumar a lo que ya existe, para peregrinar a la Casa de la Madre, que sana a los hijos heridos”.
El Arzobispo de Toledo indicó que “la credencial podrá ser sellada en las diferentes parroquias y otras instituciones” por donde atraviesan las 23 rutas de peregrinación.
En ese sentido, el P. Javier Gómez-Elvira explicó que existen 23 itinerarios diferentes para peregrinar hasta el santuario mariano de Guadalupe.
“Allí donde hay un peregrino hay un camino de peregrinación”, aseguró el P. Gómez-Elviria.
Uno de los caminos más históricos para llegar al Santuario de Guadalupe es el Camino Real de Madrid, que toma el nombre “por el patrocinio que recibió de los reyes” o el Camino de los descubridores que pasa por localidades que rememoran a ilustres personajes extremeños como Francisco de Godoy, Mencía de los Nidos, Francisco Pizarro y Francisco de Orellana. O el Camino del Monasterio de Yuste, que guarda una especial relación con el emperador Carlos V.
Pilar Gordillo, la delegada de Fe y Cultura de la Archidiócesis de Toledo, indicó que los diferentes caminos se encuentran “salpicados de ermitas, iglesias, templos parroquiales, que anticipan el encuentro con la Madre, Virgen Morena de las Villuercas, donde las imágenes, los retablos, las pinturas recogen en sus expresiones los misterios de la vida de Cristo, el amor a la Virgen y los santos, y la vivencia de la fe de muchos pueblos”.
Gordillo insistió que “Guadalupe nos espera con la sanación también por la liturgia y la Palabra porque se trata del epicentro de la vida espiritual de toda una comarca, de todo un pueblo de castellanos y extremeños”.
El Año Jubilar Guadalupense se inauguró el domingo 2 de agosto de 2020 con la apertura de la Puerta Santa del monasterio de Guadalupe, en Cáceres, España. El Año Santo Guadalupense se celebra cada vez que el 6 de septiembre, fiesta litúrgica de Nuestra Señora de Guadalupe, coincide en domingo.
El Año Jubilar debería finalizar el 8 de septiembre de 2021, pero debido a la pandemia de coronavirus, el Arzobispo de Toledo solicitó la prórroga hasta el 10 de septiembre de 2022 y también la posibilidad de impartir la Bendición Papal con indulgencia plenaria el 8 de septiembre de los años 2021 y 2022, y el 10 de septiembre de 2022.
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