Frente a la tensa crisis migratoria con Bielorrusia, Cáritas Polonia resaltó que continuará con sus actividades en la frontera para ayudar a todos los necesitados, ya sean migrantes, refugiados y personas que viven en la zona.
En una conferencia de prensa en Podlipki, en Podlasie (Polonia), el director de Cáritas Polonia, P. Marcin Iżycki, resaltó que “mientras dure la crisis, estaremos con todos los necesitados”.
“En nuestras actividades de Cáritas tratamos de recordar a todos los grupos afectados por la crisis: los migrantes y los refugiados, las personas que viven en estas zonas y los servicios”, agregó.
El P. Iżycki señaló que “no hay contradicción en ayudar a los necesitados y respetar el trabajo de quienes defienden la seguridad de nuestra frontera y nuestro país”.
La guardia militar, con más de 10 mil soldados, reforzó la frontera entre Polonia y Bielorrusia ante el intento de al menos dos mil migrantes, provenientes de Medio Oriente y Asia, de cruzar al lado polaco.
La Unión Europea (UE) acusa a Bielorrusia de alentar la entrada de miles de personas a través de sus fronteras como una forma de castigo por las sanciones impuestas por el bloque europeo contra el gobierno del presidente bielorruso Alexander Lukashenko, que ahora cuenta con el apoyo militar de Rusia.
Lukashenko es presidente de Bielorrusia desde hace más de 25 años. En agosto de 2020 ganó las elecciones en medio de acusaciones de fraude, e inició una serie de fuertes represiones, también contra la Iglesia Católica.
La BBC indicó que Polonia, Lituania y Letonia, todos miembros de la UE, han reportado un incremento importante en el número de personas que han entrado a su territorio desde Bielorrusia en los últimos meses, sin contar con los permisos legales.
La Comisión Europea acusa a Bielorrusia de atraer a los inmigrantes con la falsa promesa de que podrán entrar fácilmente en la UE.
Se han reportado nuevos intentos de migrantes de ingresar a zona polaca, una crisis que el 19 de noviembre ha ocasionado la muerte de un bebé de un año, elevando a 12 las personas fallecidas a causa del conflicto entre Polonia y Bielorrusia.
El presidente de la Junta de la Comunidad Religiosa Musulmana de Bohoniki, Maciej Szczesnowicz, dijo que entre los fallecidos también están un joven sirio, que fue encontrado hace seis días, y un hombre africano.
Frente a esta crisis, Cáritas Polonia ha creado las Tiendas de la Esperanza, que se han instalado en siete parroquias de la Arquidiócesis de Białystok, donde se recogen alimentos, ropa, mantas, para apoyar a los necesitados.
La caridad católica resaltó que desde “septiembre, el valor de la ayuda prestada por Cáritas para apoyar a los inmigrantes en Polonia ascendió a más de un millón de zlotys” (241 mil dólares aproximadamente).
El P. Iżycki señaló que este domingo 21 se realizará una colecta en las iglesias de Polonia para ayudar a los migrantes y refugiados, en respuesta al llamado del presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia, Mons. Stanisław Gądecki, de apoyar a los migrantes y orar por una solución pacífica de la tensa crisis.
El director de Cáritas Polonia también recordó que el presidente del Episcopado condenó la utilización de tragedias humanas por parte de Bielorrusia para llevar a cabo actividades contra la soberanía polaca.
“Por ello, quiero repetir una vez más que los afectados por este mal necesitan nuestra solidaridad”, resaltó Mons. Gądecki.
El sacerdote franciscano Cordian Szwarc, que participó directamente en las actividades de Cáritas Polonia en la frontera, dijo que las comunidades parroquiales han intentado responder a la crisis desde el inicio y agradeció a Cáritas por ayudar a esta misión.
“Llevamos dos semanas aquí y podemos ver que las personas que forman estas parroquias son gente buena, en el buen sentido de la palabra; gente sencilla y buena que ha aprendido por sus abuelos lo que es bueno y lo que es malo”, agregó.
El P. Szwarc indicó que cada vez que los residentes encuentran a algún migrante que pide comida, ropa o bebida, lo ayudan de corazón.
“Hay una reacción muy distinta ante una persona que pide ayuda con la mano extendida, y una reacción muy diferente cuando ves a varios miles de personas reunidas en la frontera y presentadas de esta manera”, remarcó.
El director de Cáritas Arquidiocesana de Białystok, P. Jerzy Sęczek, también agradeció la actitud de los residentes y subrayó que si bien los católicos son minoría en algunos de los lugares donde se presta ayuda, esto no afecta el trabajo realizado por la institución.
“No distinguimos entre personas de cualquier religión o nacionalidad, ayudamos a todos los necesitados”, aseguró.
Además, indicó que Cáritas de la Archidiócesis de Bialystok ha estado cooperando con la Guardia de Fronteras desde el comienzo de la crisis, apoyando a los migrantes que lo necesitan.
El P. Sęczek destacó que los funcionarios, que a menudo son miembros de las parroquias locales, recogen productos de primera necesidad en sus iglesias para entregarlos directamente a los migrantes.
El director de Cáritas Polonia dijo que la caridad católica está dispuesta a ayudar a los inmigrantes a largo plazo e indicó que el número de personas colocadas en los centros para extranjeros en Polonia se ha triplicado recientemente.
Publicar un comentario