Este domingo 28 de febrero se celebra la Jornada Mundial de las Enfermedades Raras y el Papa Francisco ha querido mostrar su cercanía a quienes las padecen y promover las redes de solidaridad.
Al terminar el rezo del Ángelus, que presidió este domingo 28 de febrero desde el Palacio Apostólico del Vaticano, el Santo Padre se dirigió a los representantes de las asociaciones de enfermos, presentes en la plaza de San Pedro, y los saludó de forma afectuosa y reconoció su labor.
“En el caso de las enfermedades raras es más importante que nunca la red de solidaridad entre familiares, favorecida por estas asociaciones. Esa red ayuda a no sentirse solos y a intercambiar experiencias y consejos”, explicó el Pontífice.
Por ello, animó “las iniciativas que apoyan la investigación y el cuidado, y expreso mi cercanía a los enfermos, a las familias, y especialmente a los niños”.
En ese sentido, pidió de forma especial cercanía a los niños que padecen este tipo de enfermedades: “Estad cerca de los niños enfermos, de los niños que sufren, rezad por ellos, hacedles sentir la ternura del amor de Dios. Curad también a los niños con la oración cuando hay estas enfermedades que no se sabe qué son, o cuando hay una mal pronóstico”.
“Recemos por todas las personas que padecen estas enfermedades raras, especialmente recemos por los niños que las sufren”, concluyó el Papa Francisco.
6.000 enfermedades están clasificadas como raras, de las cuales el 72% son de origen genético y el 70% comienzan en la infancia.
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