En declaraciones a ACI Prensa, la vocera de la campaña, Pamela Delgado, explicó que “cuando empezamos a realizar una vigilia frente al centro de abortos, toda la comunidad de la zona comenzó a tomar conciencia porque nadie sabía que allí se hacían abortos”.
Este centro pertenecía a la cadena Unimédicos y estaba ubicado en la zona norte de la ciudad.
“Los que hacen abortos nunca dijeron que iban a hacerlos, habían dicho que harían tratamientos de várices. Entonces los inquilinos del edificio donde funcionaba el lugar decidieron hacer una carta para pedir al dueño del inmueble que ocupaban en el sexto piso que no renovara el contrato de alquiler”, dijo Delgado.
“Todos los locales dijeron: ¡No! aquí no se puede hacer abortos, manchan nuestros nombres”, resaltó.
Como fruto de la campaña de 40 Días por la Vida, el dueño del inmueble decidió que el contrato concluya “el 31 de octubre, es decir a fin de mes y ahora se va a cerrar este centro de abortos”.
Delgado dijo a ACI Prensa que Unimédicos “está en muchas partes de Colombia. Es un centro de abortos muy grande. La labor que nos queda es muy grande entonces”.
Sobre las vigilias que realizaron frente al centro de abortos, Pamela Delgado dijo que “fue algo espectacular y comenzaron el 26 de septiembre con muchos grupos de jóvenes en turnos de 3 horas desde las 10:00 a.m. hasta las 10:00 p.m. todos los días”.
Indicó que la participación de muchos grupos de jóvenes católicos permitió mostrar “la unidad de la Iglesia pidiendo el fin del aborto”.
El anuncio del cierre de la clínica de Unimédicos ocurre algunos días después de que la Corte Constitucional de Colombia rechazó un pedido para establecer el límite de 24 semanas de gestación para practicar el aborto bajo las tres causales aprobadas en 2006. Este fallo permitirá que se pueda realizar esta práctica en cualquier momento del embarazo.
El presidente de la plataforma Unidos por la Vida, Jesús Magaña, escribió el pronunciamiento “Lamentable fallo de la Corte Constitucional de Colombia”, en el que aseguró que el fallo del tribunal “en términos médicos modernos es sencillamente permitir el infanticidio”.
Tras señalar que muchos colombianos han protestado por esta decisión y por la despenalización del aborto en 2006, Magaña aseguró que “la batalla continúa y más pronto que tarde Colombia logrará sacudirse estas sentencias de muerte que le imponen magistrados que le han dado la espalda al pueblo y se han quedado atados al pasado de muerte”.
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