A través de un comunicado publicado en su sitio web, el Patriarcado explicó que tomaron esta decisión porque consideran que el futuro de los cristianos “están ligados al futuro de todo el pueblo iraquí, porque son una parte integral de ellos”.
En ese sentido afirmaron que el tema “se debe considerar y discutir dentro de su propia nación a través del diálogo”.
Por lo tanto, en su mensaje señalaron que si los organismos y países de Occidente “tienen la sincera intención de ayudar, que lo hagan con su sabiduría y consejos para luchar contra el terrorismo y lograr la reconciliación nacional, la consolidación de la seguridad y la estabilidad”.
También indicaron que esta colaboración ayudaría “para acelerar el retorno a sus hogares de los cristianos desplazados”.
Asimismo, manifestaron que esperan que los partidos cristianos “asuman sus responsabilidades históricas y adopten una postura racional y realista” ante las demandas políticas que parecen atractivas pero que “su ejecución no es viable”.
Según informó la agencia vaticana Fides, la iniciativa de esta reunión en Bruselas fue del parlamentario Lars Adaktusson, miembro del Partido Democrático Cristiano de Suecia.
En el encuentro participaron los representantes de diversos partidos políticos iraquíes.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 10 de junio de 2017
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